martes, 30 de octubre de 2007

Impunidad para agresores(agosto), castigo para activistas(octubre)

Para el malo, impunidad...

Hace más de 2 meses, para ser exacto el 4 de agosto, un grupo de alrededor de 30 personas, entre activistas de Igualdad Animal*, activistas independientes y vecinos de la zona simpatizantes de la causa, estuvimos frente al circo de Edwin Sierra, portando carteles y banderolas y repartiendo volantes a los transeúntes y asistentes, en contra del maltrato y esclavitud que sufren los animales no-humanos en los circos en general. Algunos maleantes salieron de la carpa y nos agredieron, resultando yo con una herida en la cabeza producida por un candado (8 puntos). Este hecho fue observado por 2 policías, uno de civil (quien dijo ser Mayor de la PNP) y otro uniformado (un sub oficial). Habiendo identificado a mi agresor y exhortando al policía uniformado a que lo detuviera, éste me “invitó” a retirarme. Aunque luego, puse sendas denuncias en la Fiscalía de la Nación, en contra del circo, ambos efectivos y un tal Brigadier Córdova, quien se negó a recibir la denuncia policial días después en la comisaría de Independencia, recién más de 2 meses después me notificaron para declarar en la comisaría de Sol de Oro, en Los Olivos. Casi 3 meses después, no hay sanción para los responsables.

Para el bueno, palo...
Perú Antitaurino(www.peruantitaurino.org), ente conformado por varias organizaciones de defensa animal y sociales, realizó una marcha/pasacalle para protestar contra aquella barbarie llamada corridas de toros. La marcha contaba con la autorización del Ministerio Público, pero lamentablemente nos percatamos tarde de que ésta especificaba solo hasta la cuadra 3 de la avenida Abancay. Fue allí donde nos encontramos con el cerco policial. Luego de algunos minutos detenida la marcha, fueron arrojadas algunas bombas lacrimógenas, y el compacto grupo de alrededor de 1000 personas, fue dividido (3:10 aproximadamente). Algunos se dirigieron y llegaron hasta la Plaza de Acho, otros caminábamos por las calles aledañas y algunos procedieron a esperar algún bus que los lleve a su casa. Estando los activistas solos o en grupos pequeños, la policía empezó a golpear sin razón a algunos de nosotros, e incluso a los transeúntes que nos defendían.
Transitando por una calle transversal a la av. Abancay, junto con otros 8 o 10 activistas, 2 nosotros nos separamos de ese grupo, luego de lo cual, un policía intentó golpear a un compañero, lo que motivó mi reclamo, por lo que pretendió golpearme también. Para no recibir los golpes, corrí, esquivé a un sereno que quiso apoyar al agresor, el agresor arrojó su “vara de ley” contra mí, y para mala suerte, fui hacia el cuartel del Batallón de Asalto de la PNP, siendo detenido, recibiendo un fuerte golpe en la cabeza y también en antebrazos. Dentro de éste local, también fui golpeado por aproximadamente 5 personas, reconociendo a 2 efectivos con los nombres de Ramírez y Calle. Dado el salvajismo con que me golpeaban, pensé que en la habitación a donde me dirigían, me iban a golpear hasta morir (3:30 aproximadamente). Felizmente no fue así. Allí estaban otros 6 activistas, 2 de ellos menores de edad. Algunos de ellos habían sido detenidos en algún paradero. Uno de ellos(Luis Berrospi) fue golpeado más que yo, tenía la boca hinchada y un policía le había robado su celular (hasta el momento no lo ha recuperado). Además de golpeados, recibimos ofensas y malos tratos. El congresista de la República, José Urquizo, llegó a la dependencia policial para reclamar por nuestra arbitraria detención. Los agresores desaparecieron. Luego de retirarse, llegó una abogada, a quien no se le permitió hablar con nosotros. Después nos trasladaron a la comisaría de San Andrés, donde el trato fue más civilizado. Allí nos tomaron datos y nos confiscaron nuestras pertenencias. En algún momento llegó un fiscal y luego una jueza, por el Habeas Corpus interpuesto por la detención arbitraria y las agresiones. Médicos legistas constataron las huellas de los golpes. Posteriormente me enteraría que los policías reaccionaron frente a éste Habeas Corpus, y que por ello no nos dejaron salir inmediatamente como hubiese correspondido, sino que siguieron todo el procedimiento como si fuéramos delincuentes.
Luego de eso nos llevaron a otra dependencia para que nos viera otro médico legista y pretendieron llevarnos al local de Seguridad del Estado de la av. España, donde no nos recibieron por no corresponder con el documento elaborado en la comisaría y por haber pasado más de 4 horas desde la hora que figuraba en la papeleta de detención (7pm, a pesar de haber sido detenidos a las 3:30pm). Nos regresaron a la comisaría y nos hicieron dormir en un calabozo.
Al día siguiente nos trasladaron a la Fiscalía, donde nos imaginamos que nos iban a soltar inmediatamente. No fue así. Nos encerraron en la carceleta con delincuentes peligrosos. Fueron 6 horas horribles.
Recién a las 6:30 de la noche, nos trasladaron a la oficina de la fiscal, y tras un largo procedimiento, fuimos liberados, al no haberse encontrado alguna prueba de lo que se nos acusaba (delito contra el orden público).
Esto no solo fue un atentado contra la integridad física y psicológica nuestra…Además de esto, uno de los activistas detenidos perdió un examen en la universidad, yo perdí un día de trabajo y casi todos nos hemos ganado problemas en nuestras casas....y todo por hacer algo bueno y dentro de la ley.

Agradezco a Vanesa, Ericka, María (UPA y ALCO), Martín (IA), al congresista Urquizo y a mis hermanas July y Fanny y Néstor, el enamorado de la segunda por su apoyo durante el encierro...También a Jonathan, Bicho y Pavel(IA) por estar pendientes.

*Igualdad Animal, organización fundada en España, con presencia en Perú y otros países (www.igualdadanimal.org)
Igualdad Animal no fue parte de la marcha del domingo 28, pero algunos de sus activistas participamos como independientes en ella.